He comido margaritas con los cerdos
Oro y blanco en las rosas
¡Ah! sus hocicos en flor
De amor en flor nuestra lengua.
Amanece en las fauces cordillera
Cabezas desde atrás
inexplicables
inocentes
Escupe nómada boca
ahí tu diezmo en mordiscos
de la nuca al medio cráneo
crujido en Ascra**
senda del trépano
¡Espérame, esperádme!
a mí que puedo matarme
Se insinúan apenas
las quejas de lo posible
en la magnitud del claustro
Afirmo que hay una puerta
individual
que abre un roce transmitido
Mira cómo quedó
algo distinto al impacto de la estrella
De lejos parece caricia
pero ya no soy animal en ciernes
Se me ha incrustado la paz
de la palabra pez
Pude llegar a Elea
porque ahí quise caer
*Elea, ciudad en la que nacieron Parménides y su discípulo Zenón.
**Ascra, ciudad natal del poeta Hesiodo
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C.Blázquez-(de Archeo-tipos secretos)
publicado en Factor Serpiente el 29 de septiembre 2007
2 comentarios:
Hace ya unos días que me lo llevé al temible Facebook, estimada. El poema es un recorrido fascinante. Conmueve, seduce, duele su imaginería lírica. Otro territorio propio, otro más, una vez más. En fin, leyéndolo quedo, amiga. Un abrazo.
Ese recorrido, querido Antonio, es la senda del trépano, donde sólo hay un orificio, el de la entrada, y donde todo "está sucediendo" en el pasado.
Gracias por el paseillo al temible muro de FaceBook, jejeje
abrazo
k
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