plano de la casa de Samsa,

plano de la casa de Gregor Samsa, por Nabokov

lunes, 7 de abril de 2008

EL CESTERO-C.Blázquez

Me llaman el maestro cestero
Yo me río por dentro:
al fin y al cabo tengo dos manos
y diez dedos
y una hermosa plantación de mimbreras
que heredé de mis antepasados
Qué otra cosa hubiera podido hacer
si desde niño he ayudado a mis abuelos
y a mis padres a recoger los mimbres
y he pasado tardes contemplando
como tejían no sólo cestos o sillas
incluso un pequeño ataúd
para mi hermanito que nació muerto

Vanas son las alabanzas de los hombres
a los hombres

Mi nieto enfermó de niño
le vino el maldito baile de San Vito
Sus brazos hacen aspavientos
no controla bien sus manos
Está triste porque le gustaría
hacer cestos como nosotros

Pero un día me dijo:
Abuelo he visto a las cigüeñas
que sin manos, sólo con sus picos
han tejido ese nido en el campanario.

Desde ese día
mi nieto y yo vamos a tomar
nuestras primeras lecciones
Hemos empezado por copiar
los pequeños nidos de las golondrinas.
Hemos tejido sin manos
ayudándonos de un pequeño pico de palo
que nos atamos en la cara
unos cestillos que vamos a vender
al mercado
Los llaman cestos-nidos
y las gentes creen que los he hecho yo.

Mi nieto y yo nos reímos por dentro.

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C.Blázquez, de Arqueo-tipos secretos

3 comentarios:

Amalia Pedemonte dijo...

Gran y sintética verdad

"Vanas son las alabanzas de los hombres a los hombres"...

Un beso, Aquileana :)

karmen blázquez dijo...

Gracias querida Amalia, estamos tan acostumbrados a vernos como la cumbre de la evolución... mas la Naturaleza que no entiende ella de reinos estancos, ni de más ni de menos, tan sólo adecuaciones "económicas" que abominan de lo superfluo, nos enseña que somos uno más; hemos aprendido habilidades de las arañas, de los pájaros, los tejidos, las casas,incluso el pincel o el lápiz pretenden, acuminados,ser picos de aves, para que el trazo adquiera la precisión del punto, la capilaridad del punto...

Un fuerte abrazo
k

Durandarte dijo...

Insobornable, no renuncias ni al cuento ni al poema. Pese a la dificultad, ambos se dicen.

Salud,

P.